Buenas, mucha gente hoy día confunde la fe con la creencia. La fe va mucho más allá e ilumina y redimensiona todas las facetas humanas. La fe ofrece de entrada una nueva mirada sobre el mundo y las cosas, una nueva perspectiva y un nuevo horizonte que da sentido a todo, hace ver más allá, por tanto nos hace trascender sobre lo simplemente material. La fe nos hace mirar a los otros y a nuestra vida de manera profunda, desarrolla la empatía y la comprensión. La fe nos dignifica y nos hace crecer. Fe no en algo, sino en Alguien, en Jesus, que pone sobre nuestro horizonte todo lo que podemos llegar a ser con los valores del Reino.
Por todo ello, hoy tendríamos que pedirle al Señor, que nos ayude a aumentar nuestra fe. Esa fe que como un granito de mostaza crece y da mucho fruto.
Y el Evangelio de este domingo nos trae otra dimensión: la del servicio y la obediencia que son valores hoy denostados en la sociedad del culto al yo, a los derechos personales y la autosuficiencia. Qué significa hoy ser siervo, a quien servimos, a quien obedecemos? La fe se alimenta de actitudes. Hemos hecho lo que teníamos que hacer. Simplemente saber a quién servimos y como lo hacemos.
Feliz semana y un abrazo, Paco
