El domingo de las tentaciones 1º Cuaresma A

El domingo de las tentaciones 1º Cuaresma A

 

Buenas,

comienza la Cuaresma con esas palabras que se nos dicen a cada uno en particular con nuestro nombre y apellidos en la imposición de la ceniza, «Conviértete» y la liturgia en este primer domingo de Cuaresma nos recuerda las tentaciones que se nos presentan a lo largo de nuestra vida en cada ser humano: la tentación del poder y el dominio, la tentación de la fama y el prestigio para convencer y la tentación de tener y poseer para adorar otros dioses como el dinero o las posesiones.
Jesús también las tuvo, y no fue en un momento concreto en el que se le apareció el diablo en el desierto (eso es una alegoría), sino a lo largo de toda su vida. A Él también le pudo resultar más fácil una vida cómoda y segura, un reconocimiento de que efectivamente era Dios haciendo cosas extraordinarias para que le beneficiaran delante de los hombres y fuera reconocido como Dios. Seguramente que Él sufriría con la incomprensión de los hombres y que no reconocieran las claves del Reino del Amor que traía o con la dureza de sus corazones.   
Jesús eligió otro camino cuyo único y fundamental apoyo era su Padre, nuestro Padre. Jesús nos presenta un camino de Amor y salvación, de liberación del pecado, de la debilidad a la que los seres humanos estamos sometidos. La Cuaresma es un camino que culmina en la Pascua. Es grande lo que nos espera pero tenemos que pasar por el camino de Jesús alimentándonos de su Palabra en la oración, ayunando de todas aquellas cosas que nos esclavizan e impiden ser lo que estamos llamados a ser, y siendo misericordia y entrega de amor para los otros.
Feliz Cuaresma, feliz nueva oportunidad que el Señor nos brinda para desprendernos de lo viejo, para nacer de nuevo, para recrearnos en su gracia y su salvación.
Que así sea.
Un abrazo, Paco